Cambia el ADN de asistentes a evento de poesía

En la cuarta edición de las ya tradicionales veladas de Arte bajo la Luna, los asistentes al evento, mientras disfrutaban del programa conformado por poetas y músicos, experimentaron una sensible modificación de su ADN, uno de los asistentes, que fue… vaya… fue… invitado cortésmente por nuestros científicos encubiertos y que de manera voluntaria permitió que se le practicaran las pruebas más poco comunes hizo posible conocer el resultado de tan importante modificación, incluso, dijo haber percibido en el ambiente, un tenue olor tropical, “era como si estuviera en la playa… o en un teibol”, dijo al reportero de Inventario, que también era un científico encubierto.
La modificación del ADN es importante ya que las próximas generaciones a partir de este grupo, estarán más en contacto con la literatura y las artes, dando así la oportunidad a las pequeñas y medianas empresas de desaparecer lenta y gradualmente. En comentario virtual desde las oficinas ocultas de la Organización del Nuevo Banco Mundial, el vocero de la institución comentó que está muy satisfecho por el resultado del evento y que espera que pronto se repitan y con más frecuencia. Ante la pregunta de si está dispuesto a patrocinar dichos eventos, el vocero tosió dos veces, nos señaló algo en el techo, y desapareció misteriosamente, creemos que tiene poderes sobrenaturales.
Al final del evento, un representante del presidente del periódico Inventario leyó un manifiesto para, con él, instalar un nuevo cambio en el ADN, sí, un2 nuevo cambio, así como lo leen, cuya intención es, según informó el mismo “inducir, mediante la palabra, información verídica que permita a los seres humanos la renovación de sus ideas”, ante la pregunta de cómo es que eso funciona, el representante del presidente de Inventario, que responde al nombre de Gustavo Enrique Orozco, nos señaló algo en el techo del teatro y desapareció misteriosamente, creemos que fue tras una muchacha que ya había salido del teatro.
Ah, también se entregó una placa conmemorativa. Pero eso fue una payasada de la que no hablaremos.



En esta foto podemos ver claramente cómo va cambiando el ADN de algunos participantes